El Proyecto Huemul fue ideado en 1948 por el físico austríaco Ronald Richter, quien conquistó al presidente argentino Juan Domingo Perón con la promesa de generar energía nuclear barata y a escalas industriales.
Perón le otorgó grandes sumas de dinero y autoridad presidencial dentro de la Isla Huemul, en la Patagonia Argentina. Richter nunca cumplió con sus promesas y el proyecto fue desmantelado, pero marcó para siempre la vida de los personajes de esta historia: físicos nucleares, ex trabajadores de la isla, músicos, e incluso, la última Reina de la Nieve.