Nino, 14 años, vive un despertar sexual turbulento. Instalado temporalmente con su familia en el campo, escucha hablar de la leyenda del Almamula, un monstruo que se lleva a los que cometen pecados sexuales. Es verano, los cuerpos sudan, la línea entre realidad y sueño se vuelve borrosa. Un niño desaparece. En un mundo de susurros, deseos reprimidos y plegarias, los impulsos de Nino afloran.